Publicado el: 2015-08-24 00:01:49
Escrito por: Verónnica Scutia
El Síndrome de Fatiga Crónica/Encefalomielitis Miálgica (SFC/EM) es una enfermedad grave e incapacitante, que se caracteriza por un cansancio intenso que no mejora con el reposo.
El hecho de seguir usando el término SFC, dándole mayor importancia a la fatiga, síntoma que aparece en muchas otras patologías, ha contribuido a menospreciar en muchos aspectos esta enfermedad.
El diagnóstico, está basado en la sintomatología por la ausencia de marcadores específicos.
Síntomas
El síntoma principal, y que da nombre a la enfermedad, es la fatiga extrema desde hace más de seis meses. Esta fatiga puede ser física y/o mental en respuesta a un esfuerzo mínimo (como las actividades de la vida diaria).
El período de recuperación tras un esfuerzo es de 24 horas o más. Este nivel tan bajo de resistencia ante la actividad hace que el paciente reduzca su actividad diaria de manera drástica respecto a su situación previa a la enfermedad.
Otros síntomas que acompañan a la fatiga pueden ser:
El inicio de estos síntomas es generalmente repentino, a veces después de un cuadro similar a una gripe u otra infección. Y en función de la intensidad de cada síntoma se clasifica el síndrome como leve, moderado o severo.
Causas
La causa de la enfermedad es desconocida pero cada vez existen más evidencias científicas de que hay algún tipo de infección viral de base y que existe una alteración de la respuesta del organismo a las infecciones.
Numerosos estudios demuestran que existe una reactivación viral del grupo de herpes virus como Epstein Barr virus, citomegalovirus, el HHV-6, parvovirus B19 o enterovirus. Gracias a investigaciones recientes se ha observado una disfunción inmune global.
Por otro lado, el hecho de tener un sistema inmune debilitado facilita la predisposición a sufrir ciertos tipos de cáncer, como los linfomas no-Hodgkin o leucemia linfocítica crónica (cánceres relacionados con el sistema inmune).
Prevalencia
La prevalencia actualmente es desconocida en nuestro país, aunque estudios la cifran en un 0,5 % de la población, aunque las cifras pueden ser mucho más elevadas por la dificultades diagnósticas y el peregrinaje de los enfermos por las consultas hasta conseguir un diagnóstico.
Tratamientos
No existe por el momento un tratamiento curativo, pero existen diversos estudios en marcha con antivirales y con inmunomoduladores.
El control de la alimentación, eliminando ciertos alimentos como más poder alergénico como los lácteos o el gluten parece que puede provocar una mejora en un gran grupo de pacientes